Por: Andrés María García Cossio
(Amagarcos)
Como ex alumno de esta prestigiosa
institución educativa (cursé 2 grados de primaria durante la década de los años
70); se marca en mi un sentido de pertenencia e identidad especial;
por cuanto no se trata simplemente de mi lugar de trabajo, se trata de una
parte de mi vida, que contribuyó en la buena formación de mi personalidad y formación
profesional en especial (No en vano hoy soy profesional del área de la lengua castellana). Por esta y otras
razones nuestro compromiso en sumo grado con la conducción de la Normal Manuel
Cañizales hacia la excelencia, como reza el saludo institucional de nuestra
normal.
A nuestra llegada a la
institución, quisimos darle un proyecto de vida a la normal; y hablamos de
proyecto de vida refiriéndonos a un norte diferente a la función formadora que
tiene por naturaleza; este proyecto debe posibilitar la identidad cañizalista,
como en un entonces la tuvo, enmarcada en la formación lingüística (lengua
castellana).
Así las cosas, proponemos integrar
la gestión del conocimiento en los procesos de la Escuela Normal, como
principios para el desarrollo institucional, creando así un ambiente en el cual,
el conocimiento y la información disponibles en la institución, sean abiertos,
accesibles y puedan ser usados para estimular ciencia tecnología y la
innovación pedagógica; provocando mejoras en la toma de decisiones y
produciendo nuevos conocimientos. La clave está en crear una cultura en la cual,
la información y el conocimiento, se valoren, se compartan, se gestionen y se
usen eficaz y eficientemente en la formación de los formadores.
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